La psicología infantil
es una rama de la psicología, la cual como su nombre lo indica se enfoca en el
tratamiento de niños y adolescentes. Su enfoque se centra en el desarrollo físico,
motor, cognitivo, perceptivo, afectivo y social del infante, teniendo como
principal objetivo prevenir y resolver los problemas en la salud mental de los
niños. Existen diversas problemáticas que se pueden resolver a través de la
psicología infantil como es el fracaso escolar, problemas emocionales,
maltrato, abusos, problemas de incontinencia, conductas agresivas, problemas de
sueño o alimentación, así como hiperactividad y problemas de lenguaje entre
otros.
Existen diversas metodologías dentro
de la psicología infantil, entre las más conocidas están la terapia de juego,
el análisis conductual aplicado, y las
técnicas psicodinámicas.
Terapia de juego:
Se refiere a la
utilización del juego como técnica para comprender el estado emocional del
niño, ya que el juego es la manera natural de comunicación y expresión del
niño.
Su principal objetivo
es el de entender los mecanismos que intervienen durante el juego, ya que
mediante este el niño expresará sus ansiedades y preocupaciones, mientras que
el terapeuta lo guiará para que sea capaz de resolver sus conflictos por medio
del juego, lo que permite que no sea en método invasivo para el niño.
Por medio de la terapia
de juego se genera en el niño el desarrollo de habilidades de aprendizaje, liberación
de energía y estimulación sinestésica. El niño adquiere el dominio de
situaciones, lo que lo llevara a buscar soluciones a sus problemas, generando
iniciativa y comprensión.
Melanie Klein, empleó
el juego como sustituto de la verbalización para comunicarse con los niños. Carl
Rogers y Virginia Axline realizaron grandes aportaciones a la terapia de juego
centrada en el niño, en donde se acepta del niño, lo que éste quiera dar
durante la terapia. El terapeuta debe reconocer los sentimientos que el niño
expresa, y devolverlos para que modifiquen la conducta del niño.
Análisis conductual aplicado:
Es una mezcla de diversas técnicas
conductuales y cognitivo-conductuales, mediante las cuales se pretende realizar
cambios en conductas específicas que presenten los niños. se realiza una evaluación
de la problemática, identificando las conductas indeseables y los factores
ambientales que las propician. Posteriormente se estructura un plan de
intervención en donde los padres toman parte del control de este método, ya que
deben realizar cambios y mantener las conductas deseables y eliminar las
indeseables, en base a las indicaciones del terapeuta. Una de sus técnicas más conocidas es la economía de fichas, en donde por cada acción deseable que realice el niño se le otorga una ficha, mientras que por cada conducta indeseable se le retira una ficha, al juntar determinado número de fichas se le otorga un premio.
Este tipo de técnicas son muy
efectivas para resolver problemas como enuresis, berrinches, fobias, trastornos
alimenticios, adicciones entre otros.
Corriente psicodinámica:
Ana Freud comenzó a
utilizar el juego como forma de atraer a los niños a la terapia y como medio
terapéutico. En el psicoanálisis tradicional,
la mayor parte del trabajo de análisis se daba cuando se unían los aspectos
saludables de la personalidad del paciente, con las fuerzas contrapuestas por
el analista, sobre su Yo enfermo. Cuando el niño va desarrollando una relación
satisfactoria, la atención de la sesión se traslada desde el juego a las
interacciones verbales.
Las
técnicas durante el tratamiento son la interpretación de los sueños en búsqueda
de los rastros, junto con el niño. Otro recurso es la narración de los ensueños
diurnos. El dibujo es un auxiliar para visualizar la problemática del paciente
y finalmente, el juego es útil corno procedimiento analítico.
Como ya se
mencionó antes Melanie Klein utilizó la técnica del juego con los niños,
partiendo de la idea de que el juego es la vía de acceso al material
inconsciente. Los juguetes son los instrumentos para conocer la fantasía
inconsciente. Por lo tanto, la conexión es con el inconsciente del niño. Se
analiza la relación con los objetos introyectados en el mundo interno. El psicoanálisis es aplicado
a niños de tres a seis años de edad. La meta es, que el niño perciba de modo
menos amenazante su medio externo, provocando una reducción de la ansiedad del
niño.
Para determinar el tipo de
tratamiento es importante considerar diversos puntos, como la edad del infante,
etapa de desarrollo, características de personalidad y la problemática que
presenta.
Es muy importante que ante cualquier
cambio que los padres o tutores perciban en el niñ@ acudan a un profesional, ya
que si bien los niños se encuentran en constante cambio, pueden estar
expresando una problemática o inconformidad. Recordemos que para los niños
expresar sus emociones puede resultar complicado, por lo que tratarán de
expresarse de diferentes maneras, como son:
-Cambio en las actividades que antes
realizaban
-Aislamiento
-Conductas agresivas
-Problemas a la hora de dormir
-Aparición de diversos temores (a la
oscuridad o a quedarse solo)
-Problemas con la alimentación
(aumento o disminución)
-Berrinches incontrolables
-Descuido o deterioro de sus
juguetes
El papel del psicólogo infantil no
solo se limita a la resolución de conflictos, sino que también puede
prevenirlos o simplemente mejorar la calidad de vida del niño, asegurando un
mayor crecimiento personal y en un futuro profesional, desarrollando
habilidades como:
-Asertividad
-Buen nivel de autoestima
-Confianza en sí mismo
-Habilidades relacionadas a los
diversos tipos de inteligencia
-Resolución de problemas
-Manejo de emociones
-Focalización de energía
-Orientación vocacional